oktubre.2

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persignarse no en vano
ni por cábala
y salir con la cara limpia entera
por las calles de todos los días

guardar el perfume ese
/el inocultable ni visible/
para el momento correcto

hacer colores de sonidos
y gustar los tactos
hasta volverse más loco que ahora

pero no tanto

lo justo para quedarse
al borde de la línea
de este lado

eso es octubre:

la remática ondulada a medio decir
sucesión arquetípica de esa clase de puntos suspensivos
que te estiran la lengua y los suspiros y las neuronas y el silencio

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